Abuso sexual infantil en Nicaragua

  1. Castillo Sequeira, Marcia
Zuzendaria:
  1. Félix López Sánchez Zuzendaria
  2. Ignacio Montero García-Celay Zuzendaria

Defentsa unibertsitatea: Universidad Autónoma de Madrid

Fecha de defensa: 2003(e)ko abendua-(a)k 19

Epaimahaia:
  1. José Antonio Carrobles Isabel Presidentea
  2. Cristina del Barrio Idazkaria
  3. Valeriana Guijo Blanco Kidea
  4. Amalio Blanco Abarca Kidea
  5. María del Rosario Martínez Arias Kidea

Mota: Tesia

Teseo: 104475 DIALNET

Laburpena

Es una investigación exploratoria, descriptiva y transversal cuyos principales objetivos fueron: establecer la tasa de prevalencia del abuso sexual, caracterizar la experiencia de abuso y a sus protagonistas, así como identificar las consecuencias a corto y largo plazo y las estrategias utilizadas para afrontar el abuso sexual, y otros eventos vitales estresantes. Se utilizaron dos estrategias metodológicas complementarias para la recolección y análisis de la información, lo cual supuso la realización de dos estudios. El primero es de naturaleza cuantitativa y fue realizado mediante una encuesta a la población general. Se tomó una muestra probabilística de la ciudad de Managua constituida por 784 pobladores de ambos sexos, de entre 16 y 60 años de edad y de todos los niveles socioeconómicos. El segundo estudio es de corte cualitativo y consistió en la elaboración de cinco historias de vida mediante entrevistas en profundidad a igual número de participantes de ambos sexos (tres mujeres y dos varones) y en edades comprendidas entre 21 y 42 años. Los resultados del primer estudio indican que la tasa de prevalencia del abuso sexual infantil en la ciudad de Managua es alta (20.3%), siendo mayor para las víctimas femeninas (26.0 frente a 13.6%), y que la misma varía según el límite de edad establecido para la infancia y las conductas sexuales incluidas en la definición utilizada. Por otro lado, la edad de mayor vulnerabilidad para las víctimas es la prepubertad y el inicio de la adolescencia (10 a 13 años), la mayoría de los ofensores son varones, adultos jóvenes y de mediana edad (21 a 50 años), y conocidos o amigos de la familia de las víctimas. Las consecuencias de corto plazo más relevantes fueron las de tipo emocional (miedo, vergüenza, culpa y rechazo a la sexualidad/ sexo de los ofensores), mientras que las de largo plazo fueron las denominadas "síntomas clínicos" y "dificultad en las relaciones sociales