Celanova medievalun recorrido por la historia y el arte del monasterio de san salvador de celanova, desde el siglo x hasta el xvi

  1. MÍGUEZ GONZÁLEZ, CARLOS
unter der Leitung von:
  1. María Pilar Alonso Abad Doktormutter

Universität der Verteidigung: Universidad de Burgos

Fecha de defensa: 30 von Juli von 2021

Gericht:
  1. Sixto José Castro Rodríguez Präsident/in
  2. Óscar Raúl Melgosa Oter Sekretär
  3. Clara Fernández-Ladreda Vocal
  4. Marta Navazo Ruiz Vocal
  5. María Concepción Porras Gil Vocal
Fachbereiche:
  1. HISTORIA, GEOGRAFÍA Y COMUNICACIÓN

Art: Dissertation

Teseo: 688053 DIALNET

Zusammenfassung

Todavía hoy, la imponente fábrica del Monasterio de San Salvador de Celanova destila grandeza. Desde su fundación, en el año 936, la abadía se convirtió en un crisol de donaciones de reyes, nobles y pueblo llano, de tal magnitud, que llegó a convertirse en la casa benedictina más importante de Galicia, hasta la reforma monástica de los Reyes Católicos. Sus casi mil años de andanza fueron testigos, no solo de los sucesos más importantes de la historia de la región, sino que constituyeron, también, oportunidades para que, a pesar de la incuria de los tiempos y la protervia de los hombres, llegase hasta nosotros un legado que sigue asombrando al que lo contempla. El llamado Arte de repoblación, el Románico, el Gótico, el Clasicismo renacentista, el Barroco… dejaron, en mayor o menor medida, eximias muestras de lo mejor de sí, entre las piedras del cenobio. El análisis de tanta riqueza y lo que subyace a ella es difícil de condensar, pero ese es, precisamente, el intento de este trabajo: hacer, en la medida de lo posible, un repaso por la historia y el arte de este enclave, recopilando las esencias de lo más granado de la multitud de estudios que se han hecho y se siguen haciendo, sobre cada uno de sus ingredientes, desde el siglo X al XVI. Entendemos que el paso del tiempo aporta nuevos conocimientos y nuevas visiones, de realidades antiguas, que no quedan al margen de los especialistas, pero que tampoco deben hacerlo del común de los hombres, porque ese tesoro les pertenece.